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"-Así se siente uno, maestro, como una mariposa sin control, como una caracola deshabitada en un mar perdido, como una cosa inútil, abandonada; como un campo yermo, como una tierra dura de narices...
-Mucho peso, joven -dijo el maestro-, mucha presión a cuestas, mucha casa encima, mucho mundo.
El visitante levantó su mirada algo turbia.
-¿Y qué hacer con el peso... con todo este lastre? ¿Ignorarlo?
-¿Quién sois, muchacho?
-Ya lo sabes... un ser un poco perdido o muy perdido que tomó un avión, que se pateó todo este camino...
-¿Y qué buscas?
-Sólo estar en paz.
El maestro se sonrió en su estilo.
-¿Paz?
-Sí. Paz. Nada más.
-La paz es un abandono, joven; un abandono de todo lo que no se es; un dejar atrás una cáscara, un envoltorio, un cuerpo de crisálida."
(Braddha Bala)
