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"Lo 'miro' fíjamente, tal como se mira a un ladino adversario.
Un servidor no 'es' su enemigo, pero él, desde su misma raíz obra en 'mi' contra.
Está ahí para que no 'consiga' nada, para que la derrota 'me' abrace, para que la noche 'me' envuelva de forma permanente.
Está ahí para que no 'despierte', para que 'me' pesen los párpados por la mañana, para que 'me' 'duela' el alma si los 'abro'.
Está ahí para que 'huyas' de 'mi' mirada, amor, de 'mis' palabras, de lo que 'encuentras' en ellas.
Está ahí para que todo sea un rebaño, una nada, una distorsión de lo que podría ser.
Está ahí para que no haya verdadero amor, sino solo interés, solo engrosamiento del yo, pura nada en definitiva, pura ficción.
'Míralo' bien. Está ante 'ti' como un espejo que 'te' refleja y que 'te' aconseja que 'huyas', que 'escapes', que no 'escuches' a 'tu' interior, a lo vivo en 'ti'.
'Míralo' bien. Se llama MIEDO, y se vende como un amigo, como un buen consejero, como una sonrisa en la cara o como colmadas risas... No importa que todo eso sea un poco falso y 'tus' vecinos 'compartan' el mismo juego, la misma ficción risueña. "La vida es así", se dice, en tanto, cual hormiguitas, la mayoría de seres 'mira' casi exclusivamente al suelo; pocos lo hacen hacia lo alto.
'Míralo' bien. Se llama MIEDO, y no es 'tu' amigo. No lo es."
(Braddha Bala)
(Fuente imagen: sentirsefeliz.wordpress.com)
