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"Estoy dentro de una cárcel.
Estoy tan identificado con un cuerpo que no me doy cuenta.
Sus pulsaciones son las mías, su ritmo mi ritmo y sus preocupaciones y ansiedades las mías.
Estoy tan perdido en esta celda, la tengo tan asumida, que casi ya he perdido la capacidad de aspirar a algo más, a que la vida pueda tener más contenidos.
No me sé, no me entiendo y solo yazgo sobre mi jergón a la espera de la hora de patio o de la hora de la comida, o del horario lectivo o de taller.
Estoy en una prisión. La tengo asumida y dicen que esto es lo normal."
(Braddha Bala)
(Fuente imagen: hojaderouter.com)