“’Dios’
solo puede ser hallado cuando ‘estás’ desnudo ―completamente desnudo, sin nada
que ocultar, sin ningún secreto que guardar―, cuando ‘estás’ totalmente
abierto. ‘Dios’ solo puede ser hallado cuando en ese estado de apertura no
existe nada más que un sabor ―el sabor
de la consciencia y de la presencia. Todo el mensaje de Jesús (de Nazaret)
consiste en la consciencia.”
(Osho)