"Míralos; están ahí; son guardianes silenciosos. Te vigilan sin ellos mismos ser conscientes, como sin pretenderlo, pero lo hacen.
Son los guardianes del sistema, del modo, del orden común, de lo establecido. Vigilan para que nada se salga de los márgenes, para que todo siga ahí, sumido.
Son guardianes efectivos; se relevan; te vigilan desde el televisor incluso, desde los noticieros, desde la publicidad. El orden común está inoculado en vena ya desde críos; te lo andan machacando un día y otro desde entonces.
Esto es lo normal; por eso, cuando sales a la calle, ves infinidad de gente, pero pocos seres libres en realidad, pocos seres con un propósito distinto al más extendido, pocos seres que abran verdadera brecha, que abran senda, que prueben cosas distintas, modos diferentes.
La mayoría de la gente suele comer de lo ya comido, suele beber de lo ya bebido y funciona de este modo o de este otro, pero respondiendo más o menos siempre a un patrón, a una norma de la que parecen estar irrevocablemente convencidos.
Para todo esto están los vigilantes silenciosos, para controlar todo este orden, para impedir que nadie se salga de la invisible norma, que nadie se la salte, que nadie escale por los muros de la prisión.
Este es el juego, dijo el maestro."
(Braddha Bala)
(Fuente imagen: josetorregrosa.wordpress.com)