"Nunca dejo de recordar ese pasaje en el que un maestro moribundo se dirige a su discípulo para decirle: "Nos echaremos de menos tú y yo, pero no dejemos que sea demasiado, porque en realidad ningún encuentro ni ninguna separación han tenido lugar, ya que nunca hemos dejado de ser Uno"."
(Ramiro Calle)