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"Te voy a contar la historia que posiblemente nadie te contará. Te voy a hablar sobre eso que no ves pero que te acompaña de continuo.
Te hablaré sobre esa parte interna de ti que no ves, sobre ese fundamento del que te han enseñado a huir, a escapar, a rechazar, a olvidar.
Te voy a hablar sobre esto ¿Quieres escuchar?
El ser humano nace como un niño, vive como un niño (inconsciente) y muere como un niño (todavía más inconsciente), en general, sin enterarse del fondo de lo que estaba viviendo. Sales (o te sacan) por la puerta de servicio cuando mueres y aquí no pasa nada, a seguir perpetuando el juego de la evasión, el juego de mirar a otro lado, el juego del escapismo, y, a la vez, al juego de atacar o rechazar a todo lo que resulte sospechoso de aportarte un poco de sincera luz en esta vida.
"Es fantástica la huida"... dicen, pero no son sinceros, para nada.
Al final, todo se circunscribe a lo mismo, a un juego de sufrimientos (encubiertos) de los que el ser humano se ha de liberar.
Si huyes, si te evades... y no enfrentas tus sombras... eres una pura nada en realidad para el Cosmos, un fraude para ti mismo, un jade o diamante tirado a la basura; aunque un día, sí, también podrás llegar a decir como el Buda Siddharta Gautama, cuando le preguntaron que quién era realmente, "Recordadme como aquel que despertó"."
(Braddha Bala)
(Fuente imagen: sakyagephelling.wordpress.com)