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"-Maestro, 'soy' un sabio corredor. 'Vivo' huyendo de 'mí'. 'Mis' pies están entrenados. Funcionan instintivamente. A la menor señal de lo positivo, de lo vivo, de lo real..., 'huyo' como el mejor de los galgos, ciegamente, embalado tras un conejo de mentira. 'Soy' un as, maestro.
'Me' gusta mirar a los lados, nunca al frente. 'Me' gusta perseguir moscas, musarañas, 'evadirme' de mil formas. 'Soy' todo un campeón.
Nadie 'me' gana en esto. 'Entreno' cada día, y 'mi' cuerpo aplaude y parece decir: "Venga, no 'hagas' nada, que es mejor". Esto parece decir y entonces la vida semeja sonreír y el mundo alrededor representa estar en paz.
A veces 'me' pregunto: "¿Pero no es esta paz, al fin y al cabo, la misma de los cementerios, la de la nada, la de la muerte, la de vivir ciego, mudo y muerto?"
No 'sé' señor, 'tú' eres pobre y 'yo' estoy loco, 'soy' un loco rebelde, un buscador de fantasías. ¿Por qué las 'busco', si el asunto parece estar claro y si no 'haces' nada 'vences'?
-¿'Vences'? -'inquirió' el maestro, acompañándolo con otra de 'sus' conocidas sonrisas- ¿'Vences'? -y 'dejó' ir ahora una carjada-. Los muertos nuncan 'vencen', muchacho. Solo los vivos 'vencen'."
(Braddha Bala)
(Fuente imagen: medicablogs.diariomedico.com)
