"Tanto trabajo, tanta evolución, tanto prueba y error, tanto esfuerzo para crear a un ser consciente..., que da pena, a la postre, que las personas de hoy día vivan mayoritariamente en una especie de infantil inconsciencia.
La vida es una experiencia individual, una aventura en solitario, donde una lucecita ha de encenderse dentro.
La mayoría de personas, sigue funcionando sujeta tan solo a las directrices que promueve un cerebro elemental o rectiliano, un cerebro envuelto por otro de más complejo que supera a los humanos en sus capacidades; cerebro que denuncia asimismo, a cada momento, que estamos en este mundo para algo más: para descubrirnos, para obtener respuestas a nosotros mismos...; cosa que, en otros estadios de la evolución, el individuo no pudo apenas plantearse por carecer de un cerebro tan desarrollado o de tal capacidad para la consciencia.
Ahora... el ser humano puede hacerse preguntas. Ahora puede hacerlo y alcanzar las respuestas, si va en pos de ellas; sus capacidades así se lo permiten. Mas, en su conjunto, esta sociedad anda persiguiendo las mismas cosas básicas de siempre, sujeta al instinto propio del animal: tener comida, tener cobijo, tener seguridad, tener sexo, tener descendencia... Lo otro, lo que puede alcanzar una mente consciente, queda como relegado, como dejado de lado incluso, como se deja de lado a lo desconocido o a la noche, por la oscuridad que albergan y por el recelo que nos inspiran."
(Braddha Bala)
(Fuente imagen: elpais.com)
