"Con la consideración de que estaba-vivía en la meta, estuve funcionando durante un buen número de años.
En cuanto nacías, ¡Zas!, ya estabas pretendidamente en la meta. El mundo estaba hecho, con sus edificios, con su maquinaria, con su dinámica; las respuestas estaban dadas, y en la escuela, la familia, la sociedad..., te adoctrinaban para que continuaras con tales respuestas dadas, sin problemas.
El mundo estaba hecho, sí, y te encontrabas películas de Hollywood difundiendo tal lógica, dibujos animados penetrando en las cabezas en formación de los simples niños, instaurando en ellos, en su base, unos modos, un esquema social de sólido granito.
Mas..., como no todo es perfecto, y un servidor es algo remirado, se comenzaron a ver brechas en todo eso, notas discordantes, fallos en el sistema, lógicas que no se aguantaban, sentidos que no tenían sentido más que el del absurdo que difundían.
Entonces comencé a hacerme alternativo, inconformista; entonces comencé a andar por otra senda, y comprendí, al subir a lo alto de una colina y observar el mundo que me habían dado desde una cierta distancia, que todo aquello que veía no se aguantaba, que era un puro montaje. Entonces miré hacia atrás, hacia la naturaleza que me rodeaba y comencé a andar por ella, abriendo senda y encontrando a otros que también habían abierto senda al apercibirse de lo mismo, que habían estado funcionando dentro de una jaula de grillos o algo parecido.
¿En la meta? ¿Todavía muchos piensan que están en la meta, en algo ya terminado? Qué ilusos, qué ciegos, qué abducidos."
(Braddha Bala)
(Fuente imagen: mochiladearquitecto.blogspot.com)
