"No
‘luches’ y no ‘trates’ de ir contracorriente, ni siquiera
‘intentes’ nadar; sólo ‘tienes’ que fluir con la corriente y
dejar que esta ‘te’ lleve allí donde se dirija. ‘Sé’ una
nube blanca moviéndose en el cielo… sin objetivo, sin ir a ninguna
parte, solo flotando. Este flotar es la floración esencial.”
(Osho)