"A veces lo miraba hacer, en silencio, de tapadillo...
Era un ser especial, diferente, humano, persona...
Tenía el porte de un rey y la apariencia de un mendigo...
Su cara era un mapa de la vida: guerras, heridas, fracasos, triunfos...
Sí, era un ser especial... distinto. Era un ser humano.
En la coherencia se alimentaba y el juego limpio era su base.
Era un soldado, un guerrero... y un redomado cobarde también -en apariencia-; el miedo le invadía para probarlo; era su pan cotidiano, una herramienta más, un miedo a vencer en cada momento para dar un nuevo paso en la batalla, un simple avance en el autoconocimiento.
Todo un lujo el conocerte gurú; toda una apuesta; todo un reto.
Dijiste que venimos a este mundo para conocermos, para saber quienes somos en realidad... Sólo para esto.
Dijiste que todo es más simple de lo que parece, y que las respuestas están justo al alcance de la mano; no más lejos.
Sin miedo, dijiste; sin mente... Cuando desaparecen el miedo y la mente... sólo queda... La No-mente, Lo Auténtico, Lo Que En Verdad Merece La Pena, La Paz... La Existencia, Conciencia y Dicha Absolutas: Sat-Chit-Ananda.
Gracias gurú por haber compartido unos cuantos pasos en este camino individual de la existencia
(Braddha Bala)
(Braddha Bala)
