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domingo, 19 de octubre de 2014

Sin interpretar papeles

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Solo reafirmar a los amables visitantes que pasáis por "Sano, sano, requetesano" que lo que se expresa en esta página difiere en mucho a lo que normalmente os vais a encontrar en la realidad de la calle.

El mundo exterior vive muy en la superficie y todo lo superficial o que se mueva en la cáscara del individuo parece tener bastante éxito y aceptación en ese medio.

De todas formas y como ya se ha anotado en distintos textos de advertencia que aparecen en las entradas, sobre todo de vídeos, el mensaje que se expresa en esta página es conforme al real mensaje de Buda, Lao Tsé, Krishna, Jesús de Nazareth, Sri Shánkara..., Osho... y otros grandes y auténticos buscadores de los Verdad de todos los tiempos.

Lo auténtico y verdadero y profundo no suena bien a un mundo que vive en la superficialidad y la cáscara y -como se ha expresado ya muchas veces- en la huida, en definitiva. Es más fácil vivir en la evasión, en lo exterior, en lo que contenta al ego (en esa especie -aunque no lo parezca- de prisión que ni colma de veras ni realiza). Mas, como han declarado los grandes buscadores señalados arriba y muchos más que han sido sinceros en su búsqueda, verdaderos héroes o Guerreros de la Luz, la cosa en la vida no va de evasión ni de viajes ni de distracciones para pasar el tiempo. Va de otra cosa. La vida tiene un propósito, definido. El Universo tiene un propósito, muy claro, y solo entrando en tu centro como individuo, puedes entender de qué va todo esto, qué significado tiene la existencia. Entonces, no necesitarás muchas palabras y te sonreirás simplemente. No era tan difícil en el fondo vivir en el centro, vivir en plenitud, solo había que dejar de huir y abrir la puerta de uno mismo para que entrara la luz, sin miedo, sin ego, sin mente.

¿Vivir en la satisfacción del ego que nunca acaba de colmar o vivir en la intensidad y plenitud de ser realmente uno mismo, sin interpretar papeles, sin andar perdido? Tú escoges, amigo, amiga.

Salud, Luz y Energía.

Un saludo.

Braddha Bala