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viernes, 18 de noviembre de 2011

El humano perfecto

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"La gente pobre tiene más amor, porque los pobres no han cultivado tanto la cabeza y toda su energía se mueve en torno al corazón. Estos son los dos centros: o bien la energía se mueve en el corazón o en la cabeza. Es muy raro encontrar a alguien tan equilibrado que su energía se mueva tanto en un centro como en el otro, o bien, que sea capaz de llevar la energía allí donde se necesite -desviarla-. Cuando quiere ser inteligente, canaliza, mueve su energía hacia la cabeza. Cuando quiere amar, canaliza su energía -toda su energía- hacia el corazón. Este sería el hombre perfecto."
(Osho)