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El ser humano tiene tendencia a seguir los caminos abiertos sin plantearse si son los justos o los más adecuados o si conducen realmente en una dirección propicia; esto, repetido y repetido, termina siendo una verdad incontestable, un sendero incontestable. Alguien dijo que la Tierra era plana y, por lógica, todos lo aceptaron. Alguien dijo que un 'Dios' creó la existencia en seis días y la cosa persiste hasta hoy. SIEMPRE el ser humano seguirá los planteamientos fáciles, los que no le exigen pensar; en cierta medida se le ha educado para ello, para no pensar y seguir la "trilha" (sendero) u orden establecido, aunque un simple becerro fuese el iniciador de toda la historia.
(Braddha Bala)
"Um dia, um bezerro precisou atravessar uma floresta virgem para voltar a seu pasto. Sendo animal irracional, abriu uma trilha tortuosa, cheia de curvas, subindo e descendo colinas.
No dia seguinte, um cão usou essa mesma trilha para atravessar a floresta. Depois foi a vez de um carneiro, líder de um rebanho, que vendo o espaço já aberto, fez seus companheiros seguirem por ali.
Mais tarde, os homens começaram a usar esse caminho: abaixavam-se, desviavam-se de obstáculos, reclamando e praguejando – com toda razão.
Mas não faziam nada para criar uma nova alternativa.
Depois de tanto uso, a trilha acabou virando uma estradinha onde os pobres animais se cansavam sob cargas pesadas, sendo obrigados a percorrer em três horas uma distância que poderia ser vencida em 30 minutos, caso não seguissem o caminho aberto por um bezerro.
Muitos anos se passaram e a estradinha tornou-se a rua principal de um vilarejo, e posteriormente a avenida principal de uma cidade. Todos reclamavam do trânsito, porque o trajeto era o pior possível.
Enquanto isso, a velha e sábia floresta ria, ao ver que os homens tem a tendência de seguir como cegos o caminho que já está aberto, sem nunca se perguntarem se aquela é a melhor escolha."
(baseado em uma história da India)
(baseado em uma história da India)
(Paulo Coelho)
"Un día, un becerro necesitó atravesar un bosque virgen para volver a sus pastos. Al ser un animal irracional, abrió un sendero tortuoso lleno de curvas, subiendo y bajando colinas.
Al día siguiente, un perro usó ese mismo camino para atravesar el bosque. Luego fue un carnero, líder de un rebaño, el que viendo el espacio ya abierto, hizo que sus compañeros pasaran por ahí.
Más tarde, los hombres comenzaron a usar este camino: se agachaban, apartaban los obstáculos, quejándose y maldiciendo - y con razón.
Pero no hicieron nada para crear una nueva alternativa.
Después de tanto uso, el sendero se convirtió en un camino donde los pobres animales se cansaban bajo pesadas cargas, estando obligados a recorrer en tres horas una distancia que se podría hacer en 30 minutos, en el caso que no siguieran el camino abierto por el becerro.
Pasaron muchos años y el camino se convirtió en la calle principal de un pueblo, y más tarde en la avenida principal de una ciudad. Todo el mundo se quejaba del tráfico, porque el trayecto era el peor posible.
Mientras tanto, el viejo y sabio bosque se reía, al ver que los hombres tienen tendencia a seguir como ciegos el camino que ya está abierto, sin nunca preguntarse si esa es la mejor opción. "
(Basado en una historia de la India)
(Paulo Coelho)