"La miseria es una tensión, la felicidad es también una tensión. Existe excitación en ambas. La dicha (o verdadera felicidad) es un estado de no excitación de la mente; hay luz ahí, pero no calor. Hay un baile ahí, pero no excitación. Hay un silencio, un sereno baile sin sonido. Este baile está en el vacío: no causa fatiga, no es del cuerpo. Ambas, felicidad y miseria pertenecen al cuerpo, pero la dicha (o verdadera felicidad) pertenecen a 'tu' ser; es un baile distinto."
(Osho)