"Así lo hace; viene por detrás para que no lo veas; se mantiene siempre a tu espalda; te empuja en tus decisiones; pone una venda ante tus ojos cuando 'conviene'; y te manipula como a una marioneta sin que seas consciente de ello.
Te da una identidad, un carné con un nombre y unos apellidos en él escritos; hace que te identifiques a matar con una familia, con unos ancestros, con una nación, con un club de fútbol o de béisbol, qué más da.
Nunca lo verás, porque se halla bien oculto donde nunca podrás mirar, ni pensar que está, ni tan siquiera sospechar que existe. Es tu controlador en la sombra, el que rige tus pasos para que no veas ni sientas ni te enteres.
Sumido en la tontería caminas, atadito a un yo vives, sin entender que estás atado, sujeto a algo y con un antifaz en la cara que impide que puedas ver realmente.
Nunca lo verás. Es cierto. Ni tan siquiera sospecharás de él. Es el mayor parásito que te habita, el mayor timador. Se llama yo. ¿No lo oíste bien? ¿No lo entendiste? Se llama YO."
(Braddha Bala)
(Fuente imagen: lucz See Me FB)