"¡Demonios! Shit!... ¡Qué nos están haciendo! Somos ya viejos a los dieciocho años; somos ya ineptos para mirarnos a un espejo ya de jóvenes. ¿Qué nos pasa? ¿Qué hicimos mal? ¿Qué crimen cometimos?...
Alrededor, todo parece normal. Los coches circulan, unos para aquí, otros para allí...; la señora hace lo que se espera de ella, y también el señor... La testosterona pesa, la educación también, lo aprendido, el lógico encauzamiento.
Somos ya viejos a los dieciocho años, a los veintiocho ya casi momias, a los cuarenta, casi muertos vivientes, a los cincuenta, casi un reflejo de nada... ¿Qué nos pasó? ¿Qué falló en el camino?
Todo parece normal. Si sigues la norma, lo común, eres aceptado por lo establecido, por lo heredado. Si te rebelas y haces preguntas o no te conformas o miras de otro modo..., entonces... ni el pan ni la sal.
Sin embargo, son los que no se resignan, los que investigan, los alternativos, los lúcidos..., los que cambian el mundo, los que descubren cosas nuevas, los que aportan a la sociedad y a la conciencia humana adelantos, crecimiento, verdadera riqueza.
Me niego a ser un viejo con solo dieciocho años y un muerto en vida a los cuarenta. Me niego."
(Braddha Bala)
(Fuente imagen: olgasabo.see.me/exposure2015 See Me FB)