"No mires a otro lado. No huyas. No hay nada atrás, solo apariencia de algo que se repite pero que no es. No mires atrás, no hay nada, solo incansable repetición de lo mismo, un día y otro, en una implacable rutina. Sin embargo, la mayor parte de las personas vive instalada ahí, en esa conocida y aceptada y valorada rutina, en ese sistema de cosas.
En tal rutina, no hay descubrimientos, ni crecimiento, ni frescura, ni autenticidad, ni risa que nazca de plenitud del corazón, ni paso alguno que vaya a algún lugar. No digáis esto (por supuesto) a los que 'viven' emplazados en tal rutina, porque ellos consideran que están haciendo lo justo, lo bendecido por la vida y los estamentos de siempre y, además, es una rutina bien poblada, con otra gente moviéndose en el mismo plano de conciencia.
Sin embargo, la vida de verdad comienza cuando se camina, cuando se avanza por esa vía aparentemente desconocida que está delante de los ojos y del alma y que da ligero temblor al observarla, al presentirla, al saber que se ha de andar por ella sin remisión para ir de hecho a algún sitio o para experimentar aunque sea mínimamente la verdadera vida en su entera dimensión.
No mires a otro lado. Solo hay avance ante ti, crecimiento, evolución. Lo otro, lo de atrás, la rutina tan aceptada, la repetición, es permanecer encajonado de por vida en un cofre, en un féretro, el mismo en el que te irás un día u otro de este mundo, de esta bendita oportunidad hecha para caminantes, para buscadores de sí mismos, para valientes en el viaje de la vida, para auténticos seres humanos."
(Braddha Bala)
(Fuente imagen: joannapawlowska.see.me/exposure2015 See Me FB)