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"Bebo un poco de agua cristalina de esta Fuente que da vida, que llena de resplandor al cuerpo y al alma.
Bebo Esencia, consumo Esencia, necesito Esencia, vivo por la Esencia.
Me enfrento, sin saber a un enemigo invisible, poderoso, cegador, implacable, obturador de mentes y voluntades. Me enfrento a él sin saber.
Cada día, a cada minuto, a cada segundo, esa fuerza invisible me embiste, me golpea, brega por echarme al suelo, por pisotearme.
Es un duro rival, ciertamente, que emplea el sometimiento y el miedo para medrar.
Míralo, parece, sí, parece invisible, pero es atenazador, es cegador, es devorador de lo Interno, en silencio, anestesiando a sus presas con cloroformo en forma de piruletas de colores.
Míralo. Es el rey, o la reina, la llaman ignorancia, y se dedica a devorar por dentro, a anular lo justo, a ocultar el brillo, la Luz.
Grande es su poder, sin duda. Mas... ¿Qué es la ignorancia sino un estado de carencia? Carencia de conocimiento, carencia de Luz, de criterio, de una senda adecuada por la que andar, de una senda que lleve, por fin, hacia Algún Sitio.
Sí, ¿qué es la ignorancia?"
(Braddha Bala)
(Fuente imagen: externos.uma.es)