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"Es en el silencio y la cordura donde me siento a gusto y relajado.
Es en el vacío, fuera de los movimientos impetuosos y sin lógica.
Es fuera de la locura del mundo, en suma.
Ahí me encuentro bien, cuando las piezas del puzle encajan y todo se serena y todo cobra sentido y la fuerza retorna y la verdadera sangre fluye; ahí, ahí mismo, justo ahí.
No es un lugar pero sí lo es a la vez. Es en lo natural, en lo simple, en lo despejado, en lo que está fuera del circuito de los humanos.
Por supuesto no está en las ciudades, ni junto a una carretera, ni junto a un puesto de refrescos. No, no está ahí.
Está en lo abierto; donde corre el aire puro y la zarpa de la energía obtusa se diluye, se hace nada, desaparece; ahí, justo ahí.
Siéntate en ese lugar, amigo. Da un besito al "yo" y ponlo a descansar en una cunita junto a su hermana gemela "mente". Ponlos a descansar. Cuando duermen, cuando no están presentes, es cuando aparece la verdadera cordura y el contacto con lo auténticamente real es posible. Justo ahí, cuando el "yo" y la "mente" duermen."
(Braddha Bala)
(Fuente imagen: Krishna Das FB)