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"Te lo dije, y hay que insistir en ello:
El ser humano es un diseño cósmico, un proyecto divino, es una flecha lanzada hacia un blanco; si no va hacia él, si no se dirige hacia ese blanco, degenera de su propósito esencial.
Muchos sentís una llamada interna, algo que pone dudas al magnífico y superestupendo y aparentemente perfecto sistema creado por un Dios situado en los cielos y que exhibe todo un orden, con un aparente premio para los buenos y un castigo para los malvados.
En la práctica (lo sabéis) sucede justamente lo contrario, parece que los perversos e ignorantes (de lo esencial) se llevan el premio.
No obstante, empero, aunque parezca que todo está perdido, la ley Universal sigue estando ahí, siempre, inalterable, al margen de sistemas humanos, de insostenibles justificaciones a lo que significa estar vivos aquí, en este planeta.
La ley del Universo se mantiene siempre firme, eterna, kármica:
EL SER HUMANO ES UN DISEÑO DIVINO, UNA FLECHA LANZADA HACIA UN BLANCO, HACIA EL BLANCO DEL AUTOCONOCIMIENTO. Prácticamente todo lo que se aparte de esto no es más que degenerar y perseguir viento."
(Braddha Bala)
(Fuente imagen: blog.esetec.es)