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"Desgraciadamente, estos son los dos pilares sobre los que se sustenta el mundo actual: el ego y el dinero, y prácticamente todo va de la satisfacción del primero a través de poseer el segundo. En este juego, todo parece valer, menos los valores, tampoco importa la ética o la empatía hacia el prójimo; al contrario, en este juego, cuantos menos valores se tengan mejores resultados parecen hallarse. Si posees dinero encontrarás casi todas las puertas abiertas (las del mundo), si lo tienes en el bolsillo, verás florecer artificiales sonrisas alrededor.
Todo esto parece lo normal. Hasta tal punto o extremo se ha llegado. Este es un mundo en el que casi todo parece tener un precio, incluso la simpatía o la amabilidad o la mera amistad.
Francamente, asistimos a los invisibles estertores de una humanidad que ya hace mucho tiempo que dejó de ser tal para convertirse en un mercado donde para desenvolverse en él solo es cuestión de manejar billetes o tarjetas bancarias, nada más.
Ego (o satisfacción del ego) y dinero, amigos, este es el cóctel alrededor del cual gira este bendito mundo.
Pero como por todo, siempre se paga un precio, y el precio por funcionar de esta forma es tener un mundo bastante vacío de alma, bastante vacío de corazón, pero con apariencias de éstos rigiendo las conciencias.
Sí, hay que explicarle a Galileo Galilei que, en realidad, el mundo de los humanos no juega a dorarse la cara en un largo y constante viaje de aprendizajes alrededor del Sol, sino a moverse en torno a todo un artificio (ego + dinero) que, sin embargo, consume las vidas y apaga las almas."
(Braddha Bala)
(Fuente imagen: Humor Indignado 99% FB)