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"'Dijo' el maestro:
Cuando 'vives' para afuera, 'obtienes' cosas externas.
Cuando 'vives' para adentro, 'obtienes' cosas internas y a la par externas.
Cuando 'vives' para afuera, siempre 'pareces' estar en el mismo sitio. De hecho, más o menos, 'estás' siempre en el mismo sitio.
Cuando 'vives' para dentro, aún encerrado en una celda, 'estás' avanzando por todo el Orbe, y, un segundo después, 'estás' más crecido que un segundo antes.
Cuando 'vives' para fuera, 'pareces' medrar, triunfar, obtener..., pero nada de eso 'te' está llenando efectivamente.
Cuando 'vives' para dentro, hasta el mismo respirar alimenta, colma.
Cuando 'vives' para afuera, 'tus' risas son a menudo estentóreas, porque 'tienes' una invisible necesidad de demostrar y 'demostrarte' que en el fondo 'estás' cargado de felicidad; pero 'sabes' bien que no es así, que 'tu' gesto tira más a hipócrita, que 'tus' risas no nacen de una verdadera plenitud del corazón.
Cuando 'vives' para dentro, una simple sonrisa, una sola, una de bien pequeña, abarca los vastos Universos.
Esto 'dijo' el maestro."
(Braddha Bala)
(Fuente imagen: The Eyes of Children around the World FB)