"'Recuerda’,
'Dios' no se encuentra en ningún lugar exterior ―no está en los
Himalayas, ni en Jerusalén, ni en un monasterio; 'Dios' tiene que
evolucionar dentro de ti, 'Dios' tiene que ser tu crecimiento. No es un
objeto exterior que vas a encontrar algún día. Salvo que te
conviertas en él, nunca lo vas a encontrar. Solo transformándote en
él lo encontrarás. Ese es todo el mensaje de Jesús (de Nazaret).”
(Osho)