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viernes, 28 de octubre de 2011

Desde el árbol

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"Sana sana... culito de rana. Sana sana... que mañana será mañana y la luz espera.
Sana sana, culito de rana... si no sanas hoy... sanarás mañana.
-¡¿Le das a los opiáceos?!... ¡¿A qué le das?!
Sana sana... culito de rana... que el mañana será más vivo... Sana sana... culito de rana.
-Jolín... qué tío...
Sana sana... culito de rana...
-¡Pero que ya está bien, oye!... ¡Deja eso!... ¡No seas crío!... ¡Te van a tomar por loco! ¡Sé sensato! ¡Baja! ¡Sé cuerdo como está mandado!... Sé responsable, razonable, coherente, formal... un buen padre de familia... alguien digno de respeto... ¡Hazlo al menos por tus hijos... o por Laura... o por tu madre o por lo que más quieras!... ¡Carlos... deja eso!... Te vas a caer de esa rama... o se puede romper... ¡Carlos... no seas crío!... ¡Baja!... Que no se lo contaré a nadie... ¡En serio!... Menuda pinta de cazador.
Sana sana... culito de rana."



(Braddha Bala)