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"¿No lo 'ves'? -dijo el maestro- Se vive es un estado "policial", en el que todos son guardianes de todos, en el que 'tu' vecino o 'tu' hermano o 'tu' pareja, o 'tu' padre o 'tu' madre o incluso 'tus' hijos... son los "agentes de la autoridad" más próximos. A poco que 'te' escapes de la norma, 'actuarán'. 'Dirán': ¡Ep! o ¡Ap! para 'avisarte' de que 'te' estás saliendo de la vereda, del orden establecido.
El maestro sonrió.
Realmente parece un chiste -dijo-: cuantas mayores sanas intenciones de libertad se tengan, mayor control; cuantas mayores aspiraciones en la vida, vigilancia más férrea; cuanta mayor salud interior, mayor crítica y desamparo.
El mundo parece ser así -repuso el visitante.
Es así -afirmó el gurú sin espacio para duda-. Pero no lo 'digas' muy fuerte, el poder de Avidya, Mara y Maya son aterradores, intensos, despiadados con los que buscan, pero a la postre no son más que ficción, puro juego de niños para el que no duerme.
Al joven visitante se 'le' nubló parcialmente la mirada."
(Braddha Bala)