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"La pregunta es "¿Por qué no se ha hecho antes?" Quizá es porque gota a gota se va llenando un vaso, y una vez lleno, algo ha de pasar, en un sentido u otro. La infelicidad asoma en los rostros. La felicidad prometida era bastante camelo (cuando uno se apercibe de ello). "Bailar, bailar malditos", ya no es algo que llene, y perseguir como un fan falsos ídolos de barro, acaba hartando. Y luego está el cuento de siempre, el de la familia nuclear, feliz: una casa, una linda pareja, unos hijos... vamos, la 'felicidad' más plena. Pero algo falla en todo este conjunto; tras la fiesta, tras la celebración, tras la ganancia... se oculta un cierto precipicio, el del vacío, el del encontrarse a cada momento y al pensarlo bien, con las manos y el corazón vacíos. Decía Agustín de Hipona (San Agustín): "Buscad lo que lo buscáis, pero sabed que no está donde los buscáis; buscáis la vida en la región de la muerte y no está ahí".
Quizá se trate de cambiar de estrategia, de modos, de planteamientos... de renacer como un niño nuevo a un ser nuevo, el que en verdad se és, el principio para el reencuentro con la verdadera vida y la verdadera felicidad."
(Braddha Bala)
