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"Había emprendido un largo viaje; ya hace muchos años. No sabía el destino, ni tampoco comprendía la motivación, lo que impulsaba a hacer todo aquello. El hecho era ese, simplemente el viaje. Turbio, ríspido, inútil, inservible, contracorriente.
Los peces siempre miran contracorriente, casi nunca dan la espalda a la masa de agua que les va viniendo encima; el movimiento del río les da alimento y pule su cuerpo en aerodinámica forma. Se encuentran cómodos así, mirando de cara.
El viaje del buscador es algo parecido, siempre con la mirada hacia lo vivo, hacia lo que late, hacia lo que trae verdadero contenido.
Sí. Y ¿todo para qué? ¿Para qué? ¿Para qué?...
Al final, la cosa resulta ser un gran viaje hacia la Serenidad, hacia la Paz, hacia un Estado Interior-Exterior Sin Palabras, como perdido, hacia un Estado de Conciencia-Existencia y Dicha Absolutas."
(Braddha Bala)
