"Sentimientos, velitas puestas sobre la mesa de la cocina.
Sentimientos, castillos de arena en una playa infinita. Sentimientos.
Llame usted mañana. Es usted muy amable. Gracias. No hay de qué. Sonría por favor. Pida permiso. Mañana, mañana. Ya se lo dije. No se cuele. ¿El último? Venga usted otro día. ¿Cuánto se gana? ¿Cuánto cuesta? Hace sol. Mañana nieva.
Frío como el hielo se torna el corazón cuando se le vacía de contenido, de limpia espontaneidad infantil. Frío, muy frío; como las mentiras que precisan defenderse a capa y espada; como las mentiras.
Mañana será otro día, dicen. Mañana lucirá el sol. Siempre quedan esperanzas."
(Braddha Bala)