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"Jamás 'olvidaré' el lunes que 'apoyé' el cañón de una pistola en 'mi' cabeza y 'disparé' hasta 'quedarme' sin balas, sin 'detenerme' a pensar en lo que hacía para no darle otra oportunidad al arrepentimiento. Era la despedida a un trabajo fijo, la renuncia a un futuro previsible, la jubilación de la seguridad. Pasaban diez minutos de las diez de la mañana y 'mis' últimas palabras decían, más o menos, ‘quédense ustedes con el muerto que 'yo' me largo’. 'Mi' cuerpo se desplomó y 'yo' salí por la puerta."
(Pablo Rey, El libro de la independencia, http://viajeros4x4x4.wordpress.com )
(Todo empieza con un primer paso, hacia la libertad, hacia la verdadera independencia, hacia la verdadera vida. "El que no se moja el culo, no obtiene peces". Sería demasiado fácil si la vida se basase exclusivamente en la búsqueda de seguridades y que al mismo tiempo se obtuvieran resultados de libertad, de independencia (económica sí). Desgraciadamente, la vida demuestra en la praxis que no funciona de esta manera. Cuando se opta por la "seguridad", por las "certezas" del mundo, algo invisible se pierde, quizá el alma, quizá lo más vivo de cada ser.
Viva la vida alternativa, la vida de los seres 'vivos'. -Braddha Bala-)